Manjagames

Tipo: Rpg, aventuras, puzzle, DS


Por fin, después de 6 años de espera tengo en mi manos la tercera parte de la saga Golden Sun: Dark Dawn, que transcurre 30 años después de la segunda entrega. En este juego comenzamos llevando al grupo formado por los hijos de los Guerreros de Tale: Matt, Terry y Karis.



Sinopsis: Hace siglos, el enorme poder de la Alquimia llevó el caos a la tierra de Weyard. Por eso, los sabios sellaron su poder. Aún así existen algunas personas, los Adeptos, que manifiestan poder sobre alguno de los cuatro elementos: Tierra, fuego, viento y agua.
En la actualidad, Weyard está decayendo por la ausencia de la Alquimia, y se está librando una batalla por mantener sellado o liberar ese poder.





Esta tercera entrega sigue el mismo funcionamiento que los otros dos: batallas por turnos, puzzles en los que tenemos que usar Psinergía y diálogos eternos entre los personajes en los momentos claves de la historia.
Los gráficos son parecidos a como venían siendo, pero añadiendo efecto 3D a los personajes y a los escenarios. La banda sonora sigue teniendo los temazos clásicos.

En las batallas existen varias formas de atacar, aparte de objetos usables: ataques normales con las armas, que con cada una se pueden aprender con el uso varias habilidades que se usan aleatoriamente durante el combate; ataques Psinérgicos o magias de elementos, que tienen unas animaciones bastante mejoradas con respecto a los otros juegos; y Djinn, unas criaturas elementales que se encuentran durante el juego, normalmente en los sitios más escondidos, cada uno con una habilidad diferente, desde atacar, a resucitar o mejorar estados. Hay un total de 83 Djinn, 72 de los cuales podemos llevar nosotros, los otros 11 pertenecen a Hans y Garet. Cada uno tiene también una apariencia distinta. No es gran avance, no creo que nadie se aprenda las pintas de cada uno, pero le da más realismo al juego.
Después de usar una cierta cantidad de Djinn se puede entrar al menú de invocaciones, las habilidades más fuertes del juego. Cada una necesita un número determinado de Djinn y de ciertos elementos.

Al principio parece complicado acordarse de todas las cosas al entrar a un combate o que Psinergía usar para solucionar los puzzles, pero al principio del juego entramos en un 'campo de entrenamiento' donde aprender a resolver los puzzles más típicos, y que nos cuenta la historia de los dos primeros Golden Sun de forma muy resumida, pero sirve para hacerse una idea.
Además, al conseguir el primer Djinn hay un tutorial en el que se explican todas sus posibilidades.

Para olvidadizos y despistados en el menú tenemos la Enciclopedia y la Djinnpedia, con descripciones de todos los lugares, personajes, etc. La verdad es que es inevitable entrar de vez en cuando a echar un ojo, porque la cantidad de nombres es enorme, y al acabar una misión secundaria ya ni te acuerdas de quien eres ni de qué tenías que hacer.

No he acabado aún el juego, pero parece algo más sencillo en las batallas y más centrado en puzzles. Quizás lo 'peor' de esta tercera parte sea que algunas cosas no encajan. Ciudades y templos milenarios de los que no habíamos oído hablar, y que sin embargo sobrevivieron a la catástrofe causada por el Sol Dorado, por ejemplo.

Pero en general el juego no es ni más ni menos que lo que llevábamos esperando 6 años, y no decepciona.